El decálogo de la buena bollera,10ª entrega: la bolloadicta al amor

Bueno, hemos llegado a la décima entrega del Decálogo de la buena bollera. Y como el propio nombre indica: un decálogo tiene diez entregas. Así que hoy, en teoría es la úlitma entrega del decálogo, a menos que se me ocurra algo retorcido para continuar, como siempre suele ocurrir.

He vuelto la vista atrás y...no había nadie, por eso he preferido mirar en el historial de post publicados para hacer recuento de los tópicos bolleros que aquí hemos tratado. Hemos hablado de las exes, de lo fácil que es que tu ex sea la actual de una amiga o viceversa, de la afición de las bolleras por los volantes y los deportes, por las series y películas "les"...Hemos tratado algún tipo de bollera concreta, como la intelectual o la borde...Y he decidido que falta todavía un importante tópico: la bolloadicta al amor.





Es una bollera un tanto dependiente. No sabe vivir sin estar enamorada o sin tener un rollito que le alegre sus mañanas y sus noches..Encadena una relación con otra y a menudo da un traspiés y cae de bruces porque no toma datos suficientes y comienza relaciones sin conocer de verdad a la otra persona, ni que la otra persona la conozca a ella.

Una vez ha conseguido la relación que perseguía, se agarrará a ella con uñas y dientes. Aunque vea que no funciona, perserverará y perseverará quitándole hierro a las incompatibilidades.





-Mari, que esa chica es muy rara
-Sí, es tan original...
-Mari, que no, que está fatal de la cabeza
-Es porque es una artista y todos los artistas son algo excéntricos
-¿Artista? Si vende castañas en un puesto..
-¿Y la papiroflexia de los cucuruchos? ¿Arte es sólo lo que está en los museos? ¡Qué valor!




Se dejará la piel para que la pareja no se rompa y tendrá un miedo totalmente exacerbado (osea, muy tocho) a que su pareja la deje.

-Y ya está, te dejo, es que ahora no puedo...
-¡Si es lo que quieres...! Pero no sé cómo se te ocurre decírmelo por teléfono
-¿Ein? Te estaba diciendo que te tengo que colgar, que viene mi jefe. ¿De qué hablas?
-Sí, sí.. de lo mismo



Si está insatisfecha de su relación su solución será buscarse otra "ilusión" en su cabeza. Total ¡todas valen! ¿Tienen tetas? Pues ya está. No habrá bollera fea, que no sea muy maja. Tontita que no sea una gran persona. Borde que no esconda un tesoro en su interior (o tesorito)...No tiene por qué ponerle los tochos a su pareja, sólo mascar ese pensamiento como un chicle que engaña a su estómago mientras viene la comida.






Sin embargo, cuando intuye que el barco se está hundiendo sin remedio, sea por lo que sea.. para ella no significa nada eso de que el capitán se hunde con él. De hecho, su dicho es más bien: ¡Marica el último! Y por eso comienza a buscar candidatas, para caer sobre blando(s pechos) y no tener que comerse una ruptura sola y desprevenida. Así que después de todo lo que ha luchado por mantener esa relación, cuando ya tiene el culo a salvo es más bien: ¡Hasta la vista, chata!


¿Quién no ha sido alguna vez una bollera enamorada del amor o ha tenido a una cerca?

Continuará....(supongo...)

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