El decálogo de la pareja bollera. Quinta entrega. La pareja hum..."abierta"

Bueno, las Navidades han pasado a mejor vida. Por lo menos hasta dentro de más o menos un añito. Y como era de esperar volvemos a la normalidad, puede alguno con algún kilito de más o de menos (en el banco). Así pues la programación queda nuevamente reinstaurada en su horario habitual y ... hoy toca el Décalogo de la pareja bollera.

En la entrega de hoy vamos a hablar de la "pareja abierta" (no de piernas, eso ya se presupone). Son esas dos bolleras que se encuentran por la calle y va una y le dice a la otra.. Ok. Era broma. Supongo que si no lo habéis leído con acento de Chiquito de la Calzada no tenía tanta gracia. Ejem. Podéis pensar que es una pose pero no, soy así.

¿Habéis conocido alguna vez una pareja abierta? Como la que sale en L en la 5ª temporada. Pero esa tenía una condición: podían follar con otras, pero juntas. Es decir, que podían montarse tríos, pero por separado nada de nada. A ese subtipo de pareja bollera abierta yo la llamo "juguetito humano". Porque realmente te proponen ser su juguete sexual en la cama. Como experiencia...pss, supongo que puede estar bien, pero te queda un regusto a "mujer objeto".

Otras se permiten tener sexo con otras personas siempre y cuando tengan PENE. Oh dios! He dicho la palabra prohíbida en este blog....pene, pene, pene. Y encima lo digo tres veces y no se volatiliza delante de mi uno, pues vaya. El caso es que claro, estás son parejas de bisexuales. O al menos una de las integrantes de la pareja lo es. Te explican como si fuera lo más natural del mundo, que es que no es comparable una cosa con otra, que necesitan de las dos y que como total...no es que sea comparable.. pues que qué mas dará...Pero con tías no ¿eh? A ver si entonces una se siente intimidada por si la amante tiene más talla de tetas o cociente intelectual..

Y por último, voy a mencionar a la pareja abierta estrictamente hablando. La que tiene permitido follarse a todo lo que se menena. Algunas se imponen la cláusula de que todo vale siempre que se lo cuenten y sean sinceras. ¡¡¡¡Cuidado!!!! Puede ser una trampa. A veces te cuentan esta milonga pa que se lo confíes y.. ¡¡y luego ni abiertas ni almejas (lo pilláis?) en vinagre!! Otras por el contrario imponen la cláusula contraria: haz lo que quieras, pero a mi no me lo cuentes.

A mi me llaman poderosamente la atención las que son capaces de vivir con el pacto como si tal cosa. Cierto es que yo a veces he sentido el estar con alguien a un nivel en el que la carnalidad era simplemente algo nimio en comparación a lo que compartíamos. Es decir (traduzco...), que he llegado a atisbar esa sensación de que el follarse a otro/otra sería una chorrada cuando está claro que nadie por mucho que te lo tires, te va a llegar a tocar donde esa persona te toca. Claro que si es así... ¿pa qué quieres follarte a otro/a? Es que no tengo clara la teoría y sólo la he llegado a atisbar. Estoy lejos de haber alcanzado ese momento zen.

Yo voto por la tradición, más que nada porque no sé ser de otra manera de momento.

Continuará...

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